Una pedida de mano de ensueño

¿Quién dice que no hay lugar para los sueños? Por suerte, aún hay personas dispuestas a soñar e incluso a tratar de hacer realidad dichos sueños.

Este fin de semana he tenido el enorme placer de entregar uno de los trabajos más bonitos que he preparado nunca. Se trata de un fin de semana súper romántico que he organizado para la pedida de mano de Imanol y Leyre. Supongo que todavía Leyre estará tratando de recuperarse, ya que para ella ha sido toda una sorpresa. Una preciosa sorpresa que le ha querido preparar Imanol para pedir su mano. 

Y como han tenido el enorme detalle de enviarme un emotivo mensaje de agradecimiento junto con sus fotos, os lo voy a relatar con todo lujo de detalles.

Para que os pongáis en contexto, todo comenzó con la llamada de Imanol, para contarme que quería organizar algo muy especial para su chica. Un fin de semana romántico, emotivo y cargado de sentimientos. Como os podéis imaginar, a mi me encantó la idea, ya que éste es precisamente mi punto fuerte. Y de este modo, se puso la maquinaria en marcha y comencé a idear el plan. Tenía que ser todo perfecto e incluir una parte de sensaciones fuertes, un paisaje espectacular, un lugar romántico y, como no, una buena comida para agradar al paladar. Y esto es lo que resultó:

Hola Mireia, 


no sabemos muy bien cómo expresar nuestro total y sincero agradecimiento. Porque, de verdad, no creo que haya palabras suficientes en el diccionario para poder explicar lo que hemos vivido este fin de semana. Ha sido todo tan especial, tan sencillamente perfecto, único e irrepetible.... en fin, que hay que vivirlo en primera persona para entenderlo.
Y como no hemos encontrado mejor forma de hacerte ver nuestro agradecimiento y felicidad, te enviamos un pequeño texto y varias fotografías que hemos sacado durante el fin de semana y que hablan por sí solas. 
Muchísimas gracias por todo y felicidades por tu estupendo trabajo. Esperamos que sigas haciendo felices a muchas personas, como este fin de semana nos has hecho a nosotros.


Besos,
Imanol y Leyre




Comenzamos el fin de semana por todo lo alto, con nada más y nada menos que un viaje en globo...

Tras la excursión, nos tomamos un pequeño piscolabis para reponer fuerzas y nos dirigimos a Getaria. Todo fin de semana romántico debe contar con una buena alcoba donde refugiarse. Y sin lugar a dudas, el Hotel Iturregi de Getaria cumple todos los requisitos necesarios para perderse, relajarse y disfrutar. 

Y si además de estar en el lugar perfecto, cuentas con alguien (en este caso tú, con D'Ilusiones) que se preocupe de cuidar los pequeños detalles, de poner la habitación preciosa, con los pétalos de rosa, las chocolatinas con forma de corazón, el cofre, precioso, sobre la cama, con un álbum de fotos de nuestros mejores momentos, unos novios de madera preciosos, un bouquet de flores y el anillo.... ¡Qué decir! Era como si el mundo se hubiera detenido de repente, sólo para nosotros... un momento que no olvidaremos nunca.

Y después de llorar un buen rato, admirarlo todo con detenimiento y sacarnos un par de fotos en el hotel, llegaba la hora de ir a comer. Y cómo no... ¡otro acierto rotundo! En el Restaurante Elkano nos atendieron de maravilla. Siguiendo los sabios y atentos consejos de Aitor, comimos unas kokotxas y un rodaballo de escándalo. ¡Me atrevería a decir que fue el mejor rodaballo que haya comido nunca! Una verdadera delicia...

Después, un paseo por Getaria y a disfrutar nuevamente del hotel.

Pero no podíamos marcharnos del hotel sin antes dedicarte una fotografía, para agradecer de corazón la ilusión con la que haces tu trabajo, porque como tú dices... DE ILUSIONES TAMBIÉN SE VIVE.

Y para despedirnos, un paseo en tren de vapor desde el Museo Vasco del Ferrocarril en Azpeitia y parada en el Santuario de Loiola, un buen lugar para poner punto final a nuestra aventura.

La verdad es que, depués de leer la nota y ver las fotos que nos han enivado Imanol y Leyre, creo que sobran mis comentarios. Así que me limitaré a dar las gracias a todas las personas que han colaborado conmigo y han contribuido a conseguir que este fin de semana haya sido simplemente perfecto. Gracias a Susana Cardarelli y todo el equipo del Hotel Iturregi por su simpatía y amabilidad, gracias a Aitor del Restaurante Elkano por hacernos un hueco en un día tan complicado, gracias a Mónica Custodio por su monnada de muñecos y gracias Feli por el bouquet tan precioso y por tu ayuda en cualquier momento y situación.  

Y, por supuesto, gracias a Imanol y Leyre por confiar en D'Ilusiones y por compartir estos momentos tan íntimos y especiales con todos nosotros.

¡Os deseo toda la felicidad del mundo, que es lo lo que merecéis!

Un besazo,

Mireia Elkoroiribe